Riego y abono para plantas: guía completa para el cuidado de tus plantas
Pese a que es una tarea muy sencilla, muchas personas fallan a la hora de regar las plantas correctamente. Para que no te pase a vos, aprendé en esta guía cómo regar, abonar e incluso, cuidar tus plantas cuando te vas de vacaciones.
Actualizado Escrito por Candelaria Valvason


Las plantas alegran los rincones del hogar, mejoran la calidad del aire y nos conectan con la naturaleza. Para que no se marchiten y estén siempre verdes y florecidas solo basta con conocer algunos trucos básicos para su cuidado. En esta guía te enseñamos cómo hacer abono para plantas utilizando desechos orgánicos y otros elementos que tenemos en casa, te dejamos 8 recomendaciones para regar correctamente, y como bonus track: cómo regar las plantas durante las vacaciones.
Necesitará:
- Regadera o jarra
- Agua
Cómo regar plantas de exterior, de interior y en macetas
Aunque pareciera ser un tema sencillo, muchos de los problemas relacionados con la salud de una planta, se encuentran en este paso fundamental. Por eso, a continuación, te vamos a dar algunos trucos para que sepas cómo regar las plantas de interior, de exterior y en macetas. Prestá atención a estas recomendaciones para mantener tus plantas siempre verdes y alegres:
Mantené la humedad.
Las plantas necesitan de un suelo húmedo para vivir. Aunque no está mal que de vez en cuando se rieguen solo recién cuando la tierra esté seca (esto incentiva el crecimiento de las raíces), procurá que la planta no pase muchos días sin recibir agua.
Regá con poca frecuencia, pero en profundidad.
Generalmente, no hace falta regar las plantas todos los días pero, cuando las riegues, usá una regadera o una jarra y dejá que el agua llegue bien hasta las raíces de la planta.
Regá al atardecer o a primeras horas de la mañana.
Cuando la tierra está caliente por los rayos del sol, el agua se evapora con mayor rapidez, lo que puede provocar que el agua no sea suficiente para abastecer a las plantas.
Mantené las hojas secas.
No es recomendable mojar las hojas o pétalos de flores de las plantas, mucho menos aún cuando cae el sol. Si estas no se secan rápidamente, pueden llenarse de moho o, si es invierno, pueden dañarse por el frío.
Aplicá agua según corresponda.
Uno de los trucos para regar correctamente es que averigües qué planta tenés y cuáles son sus necesidades de agua. No es lo mismo regar un cactus o una suculenta que una mala madre, la periodicidad con la que necesitan agua es muy distinta.
Regá en partes iguales.
Regar las plantas siempre del mismo lado no es bueno, ya que crecerán las raíces más de un lado que de otro. Tratá de regar alrededor de la planta para distribuir bien la humedad.
Evitá la acumulación de agua.
El exceso de agua saca el aire que llega a las raíces y esto hace que se ahoguen.
Usá tierra para las plantas que sea nutritiva.
Es importante que la tierra posea muchos minerales y nutrientes para que luego la planta pueda aprovecharlos y absorberlos.
Cómo regar las plantas en macetas
Si bien hay muchas plantas de interior fáciles de cuidar, las plantas en macetas requieren que tomemos ciertas precauciones también. Tené en cuenta lo siguiente a la hora de regar las plantas en macetas:
Regá la planta en profundidad. Las plantas en macetas tienen menos tierra que las que están en la tierra, por lo cual se secan más rápidamente.
Prestá atención a la humedad y el calor del ambiente. Si vivís, por ejemplo, en un departamento al cual le da el sol todo el día es importante que riegues las plantas más seguido que si vivís en una planta baja, que no recibe luz solar.
Metela en la bañera o en la pileta de la cocina. Una buena idea para hidratar bien las raíces es llenar la bañera o la bacha de la cocina y sumergir y sacar rápidamente la maceta (como si fuera una botella) para que el agua llegue bien a todo el interior. Después, vaciá la bañera y dejá que se escurra el resto de agua de la maceta.
No dejes que la planta esté sentada en agua durante mucho tiempo. Si el plato de abajo de la maceta tiene agua, mejor vacialo. El exceso de humedad puede formar hongos en la tierra.
Además de tener claro cómo regar las plantas de exterior, de interior o en macetas, es importante asegurarse de que la tierra está bien nutrida. Aprendé, a continuación, lo que necesitás saber respecto al abono para plantas.
Cómo hacer abono para plantas
El abono es uno de los alimentos más importantes que pueden recibir las plantas. Ayuda a que la planta obtenga minerales y nutrientes a través de la fertilización de la tierra. Unos de los abonos caseros más económicos y fáciles de obtener es el que puede fabricarse en casa, a base de restos de comida como cáscaras de huevos, restos de yerba, cáscaras de naranja, restos de lechuga, etc. Te contamos ahora cómo hacer tu propio abono casero.
Cómo hacer abono orgánico casero para plantas
Para aprovechar los desechos orgánicos como fertilizante para plantas seguí estos pasos:
Realizá agujeros en la superficie de un recipiente de aproximadamente un metro de profundidad.
Colocá dentro 10 centímetros de tierra (o más según el contenedor).
Añadí los desechos orgánicos. Es importante que no sean desechos procedentes de productos animales.
Tapá con más tierra.
Remové cada dos semana utilizando una pala, llevando los restos que se encuentren en el fondo a la superficie y viceversa, aireando así el abono.
Usá esta mezcla para abonar tus plantas.
En simples pasos podés hacer un compost en casa con desechos orgánicos. Pero, además del compost, que es un tipo de abono, también existen otros tipos. Te los contamos, a continuación.
Tipos de abonos para plantas
Existen principalmente dos grupos de abonos:
Abonos orgánicos. Este grupo engloba al estiércol, el guano, el abono verde y el compost.
Abonos químicos. Estos fertilizantes incluyen al grupo de abonos químicos convencionales o de “rápida liberación” que son aquellos que al aplicarlos le otorgan a la planta tres macronutrientes esenciales: nitrógeno, fósforo y potasio. También hay abonos químicos de liberación lenta y específicos para cada tipo de planta.
Fertilizantes caseros
Además de los desechos orgánicos que mencionamos anteriormente, existen otras alternativas caseras para para fertilizar la tierra:
Estiércol: puede comprarse u obtenerse de animales. El estiércol contiene nitrógeno, el cual sirve para nutrir la tierra.
Cáscaras de huevos: sirve tanto para abonar como para repeler algunos insectos. Lo mejor es colocar los restos triturados en forma de círculo, alrededor de la planta.
Restos de pasto cortado: aprovechá los nutrientes del pasto recién cortado. Llená un balde con agua y pasto (podés incluso usar las malezas) y dejalo reposar durante dos días antes de usar ese agua para fertilizar.
Cenizas de madera: son ideales gracias al potasio y magnesio que contienen. Simplemente diluilas en agua y agregalas a las plantas como abono.
Restos de café: es posible nutrir la tierra de las plantas con posos de café. Agregá los restos de café a una jarra con agua. Dejalo reposar toda la noche y usá ese fertilizante líquido para abonar las plantas.
Humus de lombrices: también conocido como vermicompost. Las lombrices realizan la fertilización al digerir material orgánico y descomponerlo gracias a sus enzimas digestivas.
Cómo hacer fertilizante casero líquido con bananas
Las cáscaras de bananas aportarán potasio y otros nutrientes a las plantas. Solo vas a necesitar agua y restos de cáscaras de bananas.
Poné las cáscaras de bananas en remojo durante un día.
Pasado ese tiempo, retirá las cáscaras.
Usá la solución para fertilizar la tierra sin mojar las hojas, ¡y listo!
Cómo regar las plantas en vacaciones
A nadie le gusta, después de tanto esfuerzo por cuidar y tener lindas nuestra plantas, volver de vacaciones y encontrar las plantas marchitas, con los pétalos caídos, las hojas secas y los tallos flácidos. Por eso, te enseñamos dos métodos para que sepas cómo regar las plantas durante las vacaciones.
Riego por goteo
Hacé algunos agujeros en la tapa de una botella de plástico.
Llená la botella de agua.
Ponele la tapa y enterrá la parte de la tapa en la tierra. Las gotas caerán en la tierra progresivamente, preservando la humedad.
Riego por humedad
Sumergí el extremo de un cordón viejo de zapatillas o una cuerda de algodón en un vaso con agua.
Colocá el vaso más alto que la maceta.
Colocá el otro extremo del cordón en la tierra de la maceta. De este modo, la cuerda absorberá la humedad del vaso y la trasladará a la planta.
Preguntas frecuentes sobre el riego y abono casero para plantas
¿Cuál es el mejor abono natural para las plantas?
Uno de los mejores abonos ecológicos y naturales que podemos encontrar es el que ofrecen las lombrices. Estas aportan muchísimos nutrientes como el potasio, fósforo y magnesio, ayudan con el desarrollo de la planta y la protegen de plagas. Otro buen abono natural es aquel que podemos desarrollar nosotros mismos con restos de alimentos. Es importante que estén descompuestos y mezclados con tierra antes de agregarlos a las plantas.
¿Cómo hacer abono para plantas en macetas?
Para las plantas en macetas podés usar un fertilizante líquido hecho con cáscaras de bananas o con restos de posos de café. Poné cualquiera de estas dos opciones en agua durante 24 horas. Después filtrá los restos y usá esta agua para fertilizar la tierra. Tené cuidado de no mojar las hojas.
¿Qué es un sistema de riego por goteo casero?
El riego por goteo es un sistema que permite mantener la humedad en la planta gracias a que la riega en pequeñas cantidades pero constantemente. Para hacer un riego por goteo casero hacé varios agujeros en la tapa de una botella de plástico. Llenala de agua y colocá la botella con la tapa hacia abajo, enterrada unos centímetros en la tierra.
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